martes, 16 de noviembre de 2010

Historias a contar III

Raziya es una joven de 19 años de Mauritania. Hace unos meses sus padres murieron por una enfermedad a la que ella consiguió sobrevivir. Llevaban años ahorrando para que ella se fuera del país y así más adelante poder irse ellos y vivir mejor. Entonces tenía que terminar de ahorrar lo que le quedaba por reunir para poder irse, aunque tardaría algo más de lo previsto, ya que es ella sola la que trae dinero ahora.

Una tarde-noche, después de volver de trabajar en una plantación. al volver por un camino bastante solitario y con la poca luz que quedaba del sol, un hombre se abalanzó sobre ella intentado violarla. Ella tratóde quitárselo de encima como podía, gritaba pidiendo ayuda, pero fue todo en vano. El hombre salio corriendo y lo perdió de vista. Llorando y bastante magullada, se fue como pudo hasta su casa.

Al par de semanas del horrible suceso, se dio cuenta de que estaba embarazada. Decidió que seguiría ahorrando y se iría de allí lo antes posible, pues aunque el hijo fuera de fruto de una violación, ya que ni podía abortar porque no había medios suficientes, no quería que tuviera entonces una mala vida el niño.


A los 7 meses después consiguió todo el dinero, iría en patera. Al par de días se embarcó junto con otros 24 más en una diminuta balsa. Las noches eran muy frías y los pocos suministros que tenían se agotaron en nada, por lo que su salud iba a peor y acabo cogiendo neumonía. Ya débil del cansancio y la enfermedad, quedó inconsciente.

Al llegar a tierra, los servicios de emergencias la llevaron al hospital por su estado. En un momento de lucidez, pidió que salvaran al niño, que no lo dejaran morir, y eso hicieron. El sietemesino se salvó, pero su madre no pudo. Al poco fue adoptado y creció feliz, gracias a que su madre dio todo por él, incluida su vida.



foto tomade de:http://images.indymedia.org/imc/canarias/image/6/2004-09-04_IMG_2004-08-28_23:35:13_patera-2.jpg

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